Raúl Gutiérrez apela a la nostalgia una vez más. Y lo hace en la canción que sirve de adelanto de su nuevo disco, 4º en estudio con Rulo y La Contrabanda. ¿Quizá fuera la adolescencia la época más feliz de nuestras vidas?
Esa época de nimias preocupaciones y diversión constante, en la que empezábamos a ser adultos. Dejando aparte ciertas sofisticaciones en la producción, que sea pegadiza, libre de asperezas… ¿tan diferente es a las canciones que Rulo componía con 21 años? No lo creo.
Echo mi vista “rockero-radiofónica” atrás y la de Rulo fue, tras Fito y Albert Pla, mi tercera entrevista. Como seccionista, ni siquiera había comenzado a hacer Mi Rollo Es El Rock. La Fuga presentaban su tercer disco “A las doce” en la Sala Zero de Tarragona (fuimos a verles 4 gatos).
Grabadora de cassette en mano surgió una buena charla con el entonces cantante y bajista del grupo. Y a esa entrevista la siguieron unas cuantas, la última de ellas cuando llenaron el Palau de Congresos de Tarragona en 2007. Esa noche les acompañaban RSK, un grupo tarraconense que por aquel entonces quería comerse el mundo (¿Qué ha sido de vosotros?).
Sus compañeros se despidieron de él con un “luego nos vemos” y Rulo se quedó en el pabellón atendiendo a un par de medios: “yo prefiero quedarme unas horas solo antes de los bolos, cenando, tocando la acústica en lugar de danzar por ahí”. Mientras comía un trozo de empanada del catering, fuera del rec, me confesó que acababa de ser padre y que eso era para siempre, lo de La Fuga… no lo sabía.
Ellos fueron la última gran banda, cuantitativa y cualitativamente, de nuestro rock. Y siempre se les acusó de ser un grupo moñas, por eso hablaba de suavidad en un párrafo anterior, de que la cosa tampoco es que haya cambiado tanto. Y creo que a veces confundimos suavidad con melancolía. Raúl Gutiérrez es uno de los grandes compositores del pop-rock español y, mea culpa, no le he hecho ni una entrevista con Rulo y La Contrabanda. Espero redimirme en otoño, charlando con él sobre su cuarto disco. Apelando a la nostalgia una vez más.
Marcos Rodríguez “Pae”.
